El generoso Júpiter hace todo lo posible para ayudar a adaptarnos este viernes 9 de septiembre de 2016, entrando en el signo de aire Libra, para comenzar su tránsito de 13 meses en el séptimo signo. El despegue de Júpiter puede que no sea muy «suave», ya que el primer cuarto de la Luna se produce tan sólo 30 minutos más tarde de la entrada de Júpiter en Libra. Esta fase en el ciclo lunar es siempre un momento de reposicionamiento, pero sobre todo en estos momentos, ya que estamos entre dos eclipses.
Otros aspectos se suman al viaje lleno de baches: una conjunción Luna-Marte en Sagitario puede aumentar la volatilidad de nuestras emociones, si sentimos que nuestras creencias fundamentales están siendo cuestionadas. El quincuncio Mercurio-Urano (23° 49′ Virgo-Aries) puede aportar nuevas visiones e ideas, y también la conciencia aleccionadora de que el cambio que queremos ver en el mundo tiene que empezar con nosotros.
Los aspectos lunares que tendrán lugar más tarde desafiaran nuestras suposiciones (Luna Cuadratura Mercurio), aunque también harán que mejore nuestra imaginación y el acceso a un conocimiento superior (Luna trígono Urano).
Este es un año para formar parejas, en el amor o en los negocios.
Con o sin razón, los signos tienen ciertas reputaciones. Aries es impaciente, Géminis es hablador, y así sucesivamente. Libra es el signo más estrechamente asociado con las relaciones, por lo que hay un cierto optimismo con Júpiter en Libra: ¿veremos aumentar desmesuradamente las solicitudes de licencias matrimoniales en 2017? Seguro que sí….
Obviamente, la astrología no es tan simple – no es como si todo el mundo hubiese ganado 15 kilos la última vez que Júpiter estaba en Tauro – pero ya que Júpiter es el planeta más asociado con las relaciones comprometidas, la adicción al «amor crónico» de muchos seguidores de la astrología muy posiblemente (conscientes o no de ello) haga que planifiquen la aparición de su «estrella» en su propia comedia romántica, con un final feliz en los próximos 12 meses.
De la misma forma puede suceder con el inicio de una nueva empresa con un socio o compañero.
Sin importar el simbolismo de Libra o Júpiter, los resultados que pueden obtenerse de Júpiter en Libra dependerán de los detalles individuales de nuestra carta natal.
Hay que recordar que entrar en una relación de compromiso o consolidar una ya existente, obviamente, requiere de la cooperación de otra persona, con su propia carta natal y sus propios problemas.
Si tienes Júpiter en Libra es tu «año más afortunado», también denominado el retorno de Júpiter. Entre comillas, ya que no siempre es el tipo habitual de suerte, a menudo es sutil.
Es también un impulso para los signos de aire (Libra, Géminis y Acuario) impulsando las energías cardinales.
Este es un buen año para la prosa y la poesía romántica.
Libra es un signo de la conciencia social y el idealismo. Y Júpiter nos muestra la manera de crecer más allá de las falsas divisiones que nos mantienen en un estado de conflicto.
Libra es un signo de aire y una fuerza iniciadora (cardinal) para las ideas que tienen el poder de hacer un gran impacto. Busquemos pensamientos claros y valientes, ya que es una época ideal para que surjan – demostremos que las ideas y las mentes despiertas nos llevan a un futuro brillante. Podemos ver cómo las palabras limpian el aire, iluminan o provocan. Podemos despertar al otro lado de la historia.
Algunos eventos que sucedieron con Júpiter en Libra
En definitiva, se trata de una época en donde buscaremos tanto el crecimiento interior como el exterior, mejorándonos a nosotros mismos por medio de una actitud equilibrada y objetiva. Crecerá nuestra tendencia hacia un trato personal justo y diplomático, convencidos de que así lograremos fe y confianza en la vida y en nosotros mismos.
No nos interesa necesariamente lo que se encuentra en las profundidades, sino más bien lo que está en la superficie. Con esto te basta.
Abiertos, altruistas… tratando a todo el mundo de una manera imparcial y cortés.
habrá que tener cuidado con la posible tendencia a sopesar una y otra vez todos los lados de una cuestión, lo que puede minar el desarrollo de acciones expansivas y pensamientos decididos.
La Luna entra en el estoico Capricornio la madrugada del sábado 10 de septiembre de 2016, sólo ocho minutos antes de la cuadratura exacta Saturno-Neptuno (10° 24′ Sagitario-Piscis). Puede ser difícil ver a través de las nubes de polvo de la desilusión y el pesimismo – pero si podemos elevar nuestras percepciones y hacer todo lo posible para alcanzar el propósito superior en nuestro trabajo, será el cumplimiento de uno de los retos principales de esta cuadratura. Una oposición entre Mercurio retrógrado y Quirón (23° 08′ Virgo-Piscis) se suma a la confusión general, lo que requiere que demos un paso hacia atrás, soltemos los controles, y confiemos en el proceso que está en marcha.
El domingo día 11 de septiembre de 2016 es un día cargado de emociones. La Luna en Capricornio hace una conjunción con Plutón y luego una cuadratura a Venus. Estos aspectos lunares aparecen junto al evento principal del día: una cuadratura Venus-Plutón (14° 59′ Libra-Capricornio). La ambición personal puede tener prioridad sobre otras preocupaciones, dejando un rastro de sentimientos de dolor. También podría ser difícil confiar plenamente en los demás, y es fácil caer presa de las emociones negativas tales como los celos – o sentir que hemos sido manipulados y no nos dicen la verdad.
Por otro lado, podemos aprender mucho acerca de nuestras relaciones y nosotros mismos si estamos dispuestos a ser introspectivos y honestos. Estos resultados positivos pueden ser más fáciles de alcanzar más entrado el día, cuando la Luna en Capricornio nos apoya en la consecución de nuestros objetivos con trígonos al Sol y Mercurio.
