Este sábado, el trígono (aspecto de fluidez y que facilita los asuntos en los que aparece) de la Luna en Capricornio al alegre Júpiter nos ofrece una atmósfera agradable (nuestros asuntos diarios alineados con nuestra perspectiva, Luna-Júpiter en trígono), y estaremos abiertos a diferentes puntos de vista ya que el Sol hace un sextil (facilita y ayuda a fluir) al experimental Urano (17° 19’Acuario-Aries).
Podremos sentir un impulso a movernos en base al trígono de Mercurio, el de los pies alados, al viajero Júpiter. Tal vez aparezcan en perspectiva un fin de semana fuera o un viaje de un día (Júpiter-Mercurio – arquetipos/casas de Sagitario-Géminis, casa 9-casa 3).
La cuadratura de Venus a Urano (17 ° 19 ‘Capricornio-Aries) puede hacernos actuar con cautela y a la vez excitados por la atracción de nuevos lugares y nuevas caras. Las relaciones (Venus) pueden beneficiarse afrontándolas con nuevas perspectivas (Urano), ya que las peleas pueden sobrevenir si nos ceñimos a las mismas viejas y cansinas rutinas.
Me parece muy importante resaltar aquí la importancia de la perspectiva y el nivel de conciencia con el que se aborda la astrología moderna, la astrología actual, en contraposición con la astrología meramente predictiva. En el pasado, cualquiera (incluido el que escribe) hubiese utilizado una interpretación que diría: «la cuadratura Urano-Venus hará de nuestro día un mar de conflictos y peleas, surgirán situaciones de conflicto con nuestra pareja por celos o por querer disfrutar de algo diferente».
Ahora estamos en una época donde somos mucho más conscientes de nuestras vidas y sabemos que «nuestro destino», aquellas cosas que podemos controlar (por ejemplo nuestros impulsos y nuestros deseos) dependen de nuestra respuesta a éstos y de nuestro nivel de crecimiento personal.
La interpretación ahora queda supeditada a nuestras posibilidades personales en base a nuestra conciencia y entendimiento y, sin dudar de la tensión y energía tensa de la cuadratura Urano-Venus, actuaremos de manera positiva y aprovecharemos este reto, este miedo, si somos individuos abiertos, atentos a nosotros mismos y conscientes de nuestras fortalezas y debilidades. Si no nos conocemos o actuamos sin reflexión alguna, en base a nuestras rutinas diarias nos aferraremos a estas interpretaciones del pasado y nos quejaremos de que todo nos sucede a nosotros y que es inevitable esta influencia.
Tenemos la oportunidad de aprovechar nuestro actual potencial y utilizar la astrología para lo que realmente sirve: una herramienta de autoconocimiento en el camino de la felicidad personal.
Terminamos el día abrazando algo diferente, ya que la Luna entra en Acuario por la tarde-noche; abrazar algo diferente significa que nos sentimos emocionalmente más libres.