La vida es un viaje. Nuestra carta natal es un mapa del lugar al que queremos llegar. Detalla las direcciones que queremos explorar, los retos a los que nos enfrentaremos, y los dones que deberemos traer de vuelta a los demás.
Al principio, cuando se enfrenta inicialmente el estudio de una carta astral, los indicadores pueden aparentar bastante intimidantes. Los planetas, signos, aspectos, casas son sólo lo básico. Luego están los asteroides, puntos medios, regencias, tránsitos y progresiones, y para añadir, sinastría y numerosas otras técnicas y aplicaciones. ¿Dónde empezamos? ¿Dónde acaba?
La clave para sacar sentido de todo esto es comprender que todo forma parte de un ciclo. Cuando vemos los componentes de la astrología como parte de una progresión importante, el puzle de piezas aparentemente disparatadas se funde en un marco de plenitud. Este es el objetivo definitivo de estudiar la astrología, alcanzar una relación consciente y plenitud — relación entre las diferentes partes de nosotros mismos, con los demás, y con el mismo Universo.
La propia forma de la carta natal ilustra este objetivo. El código cósmico del viaje de nuestra vida está rodeado por un círculo, símbolo antiguo de plenitud. Combinado con las cuatro direcciones, esto forma un mandala, símbolo arquetípico de integración.
“Mandala” viene del Sánscrito, significa círculo y centro. Los Mandalas son dispositivos de centrado, y revelan tanto nuestro centro de individualidad como nuestra conexión con la Fuente, el Gran Centro.
Los componentes fundamentales de la astrología (signos, planetas, casas, aspectos) son derivativos de este gran círculo. Los doce signos del zodíaco forman un círculo arquetípico de desarrollo. Cada signo marca un set particular de cualidades necesarias para la evolución de la consciencia. Desde la identidad personal (Aries) hasta la consciencia transpersonal (Piscis), cada signo expande en el aprendizaje del signo anterior, y es preparatorio para la siguiente fase. Cada una correlata con la anterior, con la siguiente, con su opuesta, y con todos los demás signos por su posición relativa en la progresión.
Las doce casas se relacionan entre ellas de forma muy parecida a como lo hacen los doce signos, basándose en cada una y progresando hacia experiencias cada vez más inclusivas. Difieren en que representan el entorno y las actividades que guiarán de forma más directa a la maestría de las energías simbolizadas por los planetas y signos. pero la progresión de las casas se asemeja paralelamente a la de los signos. Cada una se relaciona con la casa anterior, posterior y opuesta, al igual que al resto de las casas.
Las posiciones relativas de los planetas también simbolizan una progresión evolutiva de la consciencia. A mayor distancia del Sol, más abarca pasado lo personal, y es necesaria una mayor percepción para su correcta expresión. Cada planeta es una puerta o límite hacia una comprensión más inclusiva, lo cual únicamente puede venir a través de la maestría del nivel anterior.
Los aspectos también forman un ciclo progresivo de desarrollo. Una conjunción es el comienzo de un nuevo ciclo, similar a Aries y el Ascendente simbolizando un nuevo principio. Una oposición es análoga al signo opuesto, Libra y el Descendente, el equilibrio entre el yo y el exterior. Las fases de la luna ilustran con belleza esta progresión. La forma de la luna cambia constantemente, pero es un desarrollo ordenado, creciendo y menguando, lo cual, como las estaciones, hace un eco a través del ciclo de los signos, planetas y casas.
Comprender esta progresión fundamental y continua es una de las mayores claves de la astrología. Entender el poder de los símbolos y sus cualidades multidimensionales es otra. Los símbolos son como colores y tonos que simulan el inconsciente y abrazan muchos niveles de significado e interpretación. Tenemos que usar ambas partes del cerebro para descifrar nuestras cartas natales. La astrología es en definitiva una herramienta para acceder a la sabiduría intuitiva, guiándonos hacia el desarrollo de una consciencia que trasciende dualidad y desemboca en la plenitud. Síntesis. Piscis. Pero primero tenemos que pasar a través del resto del zodíaco…
Aries: tu mayor potencial es mantener una “mente de principiante” tanto como sea posible. Recuerda que siempre puedes aprender más, especialmente de las bases. Lee tanto como puedas, pero hazlo tuyo.
Tauro: uno de tus principales recursos es utilizar tus sentidos. Tienes el potencial de darte cuenta de las imágenes y los sonidos de los arquetipos a tu alrededor. ¿No te recuerda esa flor a Venus? ¿Y esa televisión a Urano?
Géminis: La astrología es un lenguaje. Como cualquier lenguaje, a más lo hablas, más te responde. Uno de tus principales recursos es pensar en imágenes, símbolos, metáforas. Una imagen vale más que 1000 palabras.
Cáncer: Siéntelo. Ten en cuenta tus estados de ánimo, cambian cuando la Luna cambia de signo. Siente la diferencia entre la ensoñación de Piscis y la acción de Aries.
Leo: ¡Diviértete! Haz astrodrama con amigos o una clase. Uno de tus principales recursos es aprender tu papel cósmico dando voz a cada uno de tus planetas y escribiendo su diálogo. ¡Reproduce distintos escenarios!
Virgo: uno de tus principales recursos es repetirte este mantra: Analiza, analiza, analiza. Rómpelo todo, para luego recomponerlo. Empieza con el planeta, luego añade el signo, casa y aspectos hasta que empiece a formar una imagen.
Libra: Tu principal recurso o potencial es comparar tu carta con otras. Imagina lo que sería teniendo esas cartas, o ser lo opuesto de lo que piensas que eres.
Escorpio: Tu potencial más sobresaliente es ser un detective. Investiga las fechas de nacimiento de tus amigos, amantes, personas cercanas, y observa cómo los símbolos encajan con tu experiencia de ellos y lo que dicen de ellos mismos.
Sagitario: El potencial para ti es descubrir tu verdad. Tan solo recuerda que todos los demás tienen la suya propia. Mucho más importante que obtener la respuesta correcta es hacer la pregunta correcta.
Capricornio: Usa la astrología con responsabilidad. Tanto lo que dices cómo lo que puede curar o herir. Si alguien te pide que mires su carta, conoce tus límites y respétalos.
Acuario: Encuentra o forma un grupo de estudio. Ve a charlas de astrología y conferencias. Uno de tus principales recursos es trabajar para reformar la imagen de la astrología.
Piscis: Ten compasión. Comprende que todo tiene su lugar en la magia de la creación y está haciéndolo lo mejor posible. Tu principal potencial: relájate, confía, y sigue tu intuición.
