Durante la madrugada del viernes 12 de agosto de 2016, un indisciplinado quincuncio de Júpiter a Urano (24° 25′ Virgo-Aries) ha abierto una caja de Pandora, que nos deja inmersos en un lío que tendremos que limpiar la mañana del sábado. Tal vez el trabajador Saturno sea capaz de ayudarnos de acuerdo con los últimos acontecimientos: el planeta anillado pasa a directo en Sagitario (9° 46′) y, al igual que todos los planetas cuando cambian de dirección, ejerce una mayor influencia cuando se detiene en el cielo.
El principal desafío del sábado 13 de agosto de 2016 puede ser especialmente evidente en el momento en que Venus haga una cuadratura a Saturno (9 46′ Virgo-Sagitario), y podríamos encontrarnos en desacuerdo con los demás a la hora de resolver las dificultades que nos ocupan en esos momentos.
La Luna en Sagitario activa los efectos del quincuncio Júpiter-Urano, haciendo un trígono a Urano y una cuadratura a Júpiter; intensificando nuestra creencia de que podemos enfrentarnos con éxito a cualquier competidor que cuestione nuestro conocimiento, Debemos tener cuidado con nuestros tintes autoritarios y practicar la moderación, porque tendremos tendencia a aceptar una cantidad exagerada de presión.
Luna en Capricornio
La Luna estará vacía de curso hasta que entra en Capricornio, lo que puede dejar un sentimiento de inquietud que cuelga sobre nuestras cabezas durante el resto del día.
Nuestros esfuerzos para volver a conectar con nuestra realidad son compatibles con la Luna en Capricornio del domingo, pero otros aspectos planetarios podrían poner trabas en nuestros planes.
La confianza en nuestras ideas se ve comprometida por la sesquicuadratura de Mercurio a Ceres, y por la oposición de Venus a Neptuno (1° 08′ Virgo-Piscis) sólo una media hora más tarde, pudiendo cuestionar la fiabilidad de nuestras relaciones. Por la tarde, sin embargo, un sextil Luna-Neptuno y un trígono Luna-Venus aplican un bálsamo calmante en los contratiempos del día.