Las Lunas Nuevas son momentos óptimos para marcar nuevas intenciones. La conjunción entre Sol y Luna genera un punto cósmico de calma, donde podemos recordar los objetivos de nuestra alma con mayor facilidad, además de percibir nuevas posibilidades. En Leo, esta Luna Nueva revela dónde estamos listos para tener más amor, creatividad y júbilo en nuestras vidas.
Leo representa el viaje de autodescubrimiento, la exploración y expresión de nuestra esencia divina. Somos chispas de luz emergiendo de la Unidad, encarnados en este planeta para aprender, amar, y servir. Cada uno de nosotros es único, disponiendo de una ventana al mundo singular y un grupo de talentos distintivo que ofrecer. Leo está representado por el León; Rey metafórico de la Jungla. Leo implica la búsqueda de convertirnos en los regentes conscientes de nuestra realidad. Tener corazón de león implica disponer del valor para adentrarnos de pleno en nuestro poder como creadores, para actuar desde el amor, y con amor. Has nacido… ¿Para ser quién? ¿Qué hace cantar a tu corazón? ¿Dónde podrías ser más aventurero, artístico, y auténtico?
Venus está en conjunción con esta Luna Nueva en Leo, iluminando el arquetipo de la divina feminidad. Nombrado tras la Diosa Romana del Amor y la Belleza, Venus representa aquello que nos hace felices de estar vivos; su signo, casa, y aspectos describen nuestros valores, estética, y talentos, en nuestra carta natal, al igual que nuestra autoestima y los deseos de relacionarnos. Venus se encuentra en tránsito a medio camino de su período retrógrado, período que empezó el 25 de Julio en 0º46’ Virgo y termina el 6 de Septiembre en 14º23’ Leo, recomendándonos reafirmar nuestras prioridades y eliminar aquello que apague nuestra luz. Venus en Leo nos empuja a otorgar más tiempo al descanso y la relajación, al placer y el juego en nuestras vidas; mientras esté retrógrado, Venus clarifica lo que más nos importa, junto aquello que nos bloquea a la hora de conseguir aquello que realmente buscamos.
En la Astrología Chamánica, el ciclo sinódico del Sol y Venus representa el desarrollo del principio femenino, nuestra capacidad de inteligencia emocional, cuidados y correlación. El paso retrógrado de Venus ocurre en un signo diferente cada 584 días, marcando la transición de una fase arquetípica a la siguiente. El último paso retrógrado de Venus (21 de Diciembre de 2013 hasta 31 de Enero de 2014) ocurrió en el signo Capricornio, implicando una redefinición de nuestros límites, responsabilidades y objetivos. Ahora Venus empieza un nuevo ciclo en Leo, guiándonos hasta una mayor expresión de nuestros dones divinos, a medida que Venus hace una conjunción menor (la más cercana a la Tierra) con el Sol el 15 de Agosto y se eleva como una estrella de la mañana alrededor del 22 de Agosto. Debido a su fase retrógrada, Venus estará casi cuatro veces más tiempo en Leo que en su paso normal en cualquier signo, 107 días este año (5 de Junio hasta 18 de Julio y 31 de Julio hasta 8 de Octubre), y dentro de un margen de 10º de Júpiter del 14 de Junio al 17 de Agosto, amplificando en gran medida el apoyo cósmico para que abramos nuestros corazones y nos amemos más abiertamente a nosotros mismos, los demás, y la vida.
Muchos planetas añaden su apoyo a esta Luna Nueva en Leo. Marte entró en Leo el 8 de Agosto y permanece en el salvaje quinto signo hasta el 24 de Septiembre, alimentando nuestras pasiones y confianza. Urano en Aries se encuentra en trígono al Sol, la Luna, y Venus, y nos urge a ser fieles con nosotros mismos y encontrar nuestro propio camino. El trígono de Mercurio a Plutón (exacto el 15 de Agosto en 13º21’ Virgo Capricornio) nos urge a transformar nuestra crítica interior en un editor beneficioso. Si nos pasamos de la raya, habrá una revisión de la realidad alrededor del 21 de Agosto, momento en que el Sol entra en cuadratura con Saturno (28º35’ Leo Escorpio).
